Lo cierto es que las medidas que anunció Draghi el pasado jueves, aunque puedan sonar a desesperadas, significan un respiro necesario para y ante los Mercados Financieros.
Se evidencia por tanto, que aunque los datos macroeconómicos eran positivos, con cierta ralentización pero positivos, necesitaban ir acompañados de medidas de mayor calado por parte del BCE.
Reducción de los tipos de interés a 0%
La rebaja de los tipos de interés debería traducirse en el acceso a crédito de forma casi gratuita free money, y poder, permitir y fomentar el ciclo expansivo en la Zona Euro.
Que los bancos accedan a una parte muy importante de financiación a tipo cero, permite poder disponer de crédito y que llegue a familias y empresas, durante un periodo que no debería ser inferior a los cuatro próximos años.
Medida valiente, superando las expectativas del Mercado, con una clara apuesta del BCE por dar plena liquidez y acceso a crédito a un precio de derribo para impulsar de una manera determinante la economía en la Zona Euro.
Ampliación del QE
Significa que incrementa de 60.000 millones a 80.000 millones por mes la compra de deuda hasta marzo del 2017, lo que significa una inversión por parte del BCE de 1,74 billones de Euros.
Evidentemente se escenifica una apuesta por la estabilidad en la Zona Euro, y confort para el inversor institucional.
Aunque a mi entender, lo realmente innovador, y que da un plus de determinación a Draghi es el anuncio de la compra de Deuda Corporativa.
La apuesta del BCE por las compañías e industria europeas viene a desvanecer el pesimismo instaurado en las bolsas durante estos últimos meses.
En resumen, la ampliación a la Deuda Corporativa, significa estabilizar el Mercado de Renta Fija de un plumazo. Transmitir al Mercado Internacional la apuesta clara del BCE por las Compañías e industria Europeas, y sobretodo, desvanecer el pesimismo instaurado en las bolsas durante estos últimos meses.
Es cierto que son medidas cuantitativas, y por tanto, deben ir acompañadas de políticas monetarias de las autoridades económicas de cada uno de los países miembros, pero es igual de cierto que el Banco Central esta resultando más sensible y más eficiente en contrarrestar las incertidumbres provocadas por los distintos riesgos a los que nos enfrentamos: La crisis del petróleo y el hundimiento de su precio, el Brexit, la devaluación del real brasileño que no se detiene y sobretodo, el temor a una posible devaluación del Yuan en China.
Resulta paradójico leer estos días críticas a las medidas adoptadas por Mario Draghi, algunas de las opiniones indican que son precipitadas, que muestran desconfianza o que gasta los “últimos cartuchos” innecesariamente. Bien, respetando cualquier posición, creo que son las medidas de mayor calado, y más acertadas de los últimos tiempos.
Esta vez, se sitúan los tipos a cero, se amplia el QE sin titubeos y entra en juego la compra de deuda privada a través de la compra de Bonos Corporativos.
No hubiera sido suficiente una bajada de tipos, ni un mantenimiento de la QE. Era necesario esta vez un golpe de timón y escenificar una clara apuesta por la economía productiva y monetaria de la Zona Euro. Esta vez, sitúa los tipos a cero, amplia el QE sin titubeos y entra en juego la compra de deuda privada a través de la compra de Bonos Corporativos.
Pues bien, me quedo atónito al ver que aquellos que se pasaron acribillando a Trichet (Expresidente del Banco Central Europeo) durante toda su trayectoria al frente del BCE por su pasividad e incapacidad de tomar medidas extraordinarias para situaciones desesperadas, hacen lo propio ahora con Draghi por razones totalmente antagónicas.
Permitirme aportar únicamente dos gráficos que ilustran a la perfección la confianza del inversor ante el anuncio de las nuevas medidas del BCE.
Como veis, desde finales de febrero y durante marzo el Mercado descontaba que el BCE debería implementar nuevas medidas de estímulo, ya que aunque los resultados macro eran moderadamente positivos la economía seguía en la pirámide del miedo y pánico escénico. Por tanto, el Mercado acogió en positivo las expectativas de nuevas medidas. Que fueron además refrendadas con el anuncio de las mismas, que superaron las mejores previsiones de los analistas, y así lo reflejaron los Mercados.
Veamos un segundo ejemplo más descriptivo si cabe con el gráfico del Eurostoxx 50:
Podéis juzgar por vosotros mismos, se cierra en 3073,80 puntos, proyectando la recuperación del índice Europeo de referencia.
En resumen, sólo el tiempo pondrá las cosas en su lugar y nos dará o quitara razones. Pero en mi opinión, resulta un acierto la determinación y el alcance de las medidas adoptadas por Draghi. Permitirme ir más allá y constatar, que en mi caso y como conciudadano Europeo es exigible e innegociable que las autoridades monetarias de cada País miembro reaccionen con la misma celeridad y eficiencia ante los desafíos que se proponen en una economía tan dinámica y global como la actual.